Each issue of the Journal will pose a Frequently Asked Question for discussion. The emphasis on discussion is based on the notion that questions are posed as starting points for dialogue and not for answers. In the spirit of the Journal as a format for interchange, there will be multiple conversation–initiators to each question. Reflections–discussions are first presented in English, followed by the Spanish translation. Readers are invited to post their responses to the question as well as their engagement with the initiating responses. Readers are also invited to pose questions for the FAQ section of future issues of the Journal. (To post, please scroll to the end of the page to the Comment box.)
Question: “How is dialogue transforming?”
Conversation-initiators: Sheila McNamee and Kenneth Gergen
Sheila McNamee
Professor of Communication, University of New Hampshire
Board of Directors, The Taos Institute
There are many ways in which dialogue can be transforming but there is one feature of dialogue that I believe is particularly generative in transforming the nature of relationships and interactions. Dialogue suspends our impulse to seek agreement when difference of opinion or worldview emerges. In dialogue we attempt to understand self and other in new ways. This focus on understanding (as opposed to agreement) opens space for different forms of mutual exploration. If I am not required to reach an agreement with one who harbors a belief or view that I find reprehensible, I find myself more willing to engage in curious conversation and generous listening. I am no longer concerned with persuading the other of the merits of my own view, nor am I centered on refuting the other’s attempt to convince me of the merits of his/her view. This movement away from “my truth vs. your truth” invites participants into a space of judgment-free curiosity. This is not to suggest that agreement and judgment are no longer outcomes of our interactions with others. Rather, the point is that dialogue offers us alternative forms of engagement that place our attention on appreciation of difference as opposed to being right or winning. Dialogue transforms how we encounter difference, encouraging us to embrace it, not minimize it. Given the complexity of the worlds we live in today, dialogue is sorely needed; through dialogue we are invited to approach all interactions with curiosity and suspend our desire for one answer and agreement.
Kenneth Gergen
Senior Research Professor of Psychology, Swarthmore College
Affiliate Professor, Tilburg University of Tilburg, The Netherlands
President, The Taos Institute
For me the question is how can dialogue be positively transforming, as I think most dialogue – and by this I mean conversation – simply sustains our commonplace patterns of relating. And there are also discordant dialogues, in which the transformation undermines relationship. When I think of positive transformation, I begin to think in terms of conversational micro-practices that can uplift the trajectory of relating. For example, let’s say a relationship is anguishing – there is a heated argument, or mutual blaming, jealousies, hurt feelings, and so on. What are those small conversational moves that one or the other can introduce into the conversation, to shift the trajectory, and restore mutual wellbeing? For example, simple moves such as apologies or acts of appreciation can often be pivotal. But more subtle and novel possibilities are also available, and I like to think that such valuable skills can be taught in therapy.
Of course, I am focusing here on transformation in ongoing relating, and the question is different if we ask how therapeutic dialogue can be positively transforming. This is a complex question, because unlike ongoing relationships, the major question is how therapeutic dialogue can transform relationships outside the therapy room. I do believe that therapeutic dialogues that challenge the client’s understandings and open up new possibilities for action can and do bring about changes in clients’ lives. However, vital questions remain concerning, for example, what kinds of challenges and openings have such potentials, and how and when these new understandings can be realized in action. So, questions of dialogic transformation remain crucial.
En cada edición de la Revista habra discusión de una pregunta frecuente. El énfasis en la discusión se basa en la idea de que las preguntas se plantean para comenzar el diálogo y no necesariamente para encontrar respuestas. En el espíritu de la revista como formato para el intercambio de ideas, cada pregunta tendrá varios iniciadores de conversación. Reflexionesn-debates se presentan primero en inglés, seguido por la traducción en español. Se les invita a los lectores a enviar sus respuestas a la pregunta, así como sus ideas sobre las demas respuestas. Tambien se les invita a formular preguntas que se usarán en la sección de preguntas frecuentes de las próximas ediciones de la revista.(Para publicar,por favor vaya al final de la página y usé el cuadro de Comentarios.)
Pregunta: “¿Cómo es transformativo el diálogo?”
Iniciadores de la conversación: Sheila McNamee and Kenneth Gergen
Sheila McNamee
Professor of Communication, University of New Hampshire
Board of Directors, The Taos Institute
Traductor: Adriana Wilkerson, Houston, TX
Hay muchas maneras en que el diálogo puede ser transformativo, pero hay una característica del diálogo que creo que es particularmente generativa en transformar la naturaleza de las relaciones e interacciones. Diálogo suspende nuestro impulso de llegar a un acuerdo cuando la diferencia de opinión o visión del mundo surge. En el diálogo, intentamos entendernos a si mismos y a los demás en formas nuevas. Este enfoque en la comprensión (en lugar de un acuerdo) abre un espacio para las diferentes formas de exploración mutua. Si yo no estoy obligada a llegar a un acuerdo con uno que guarda una creencia o una opinión que me parezca censurable, me encuentro más dispuesta a participar en la conversación y a escuchar con curiosidad y generosidad. Ya no estoy preocupada por convencer al otro de los méritos de mi propio punto de vista, ni estoy centrada en refutar el intento que hace el otro para convencerme de los méritos de su opinión. Este movimiento que nos aleja de “mi verdad contra tu verdad” invita a los participantes a un espacio de curiosidad sin juicio. Esto no quiere decir que el acuerdo y el juicio ya no son los resultados de nuestras interacciones con los demás. Por el contrario, el punto es que el diálogo nos ofrece otras formas de interacción donde podemos poner nuestra atención en la apreciación de la diferencia en lugar de tener la razón o ganar. El diálogo transforma el modo en que encontramos diferencia, nos anima a apreciarla y no a minimizarla. Con la complejidad de los mundos en cuales vivimos hoy en día, el diálogo es muy necesario, a través del diálogo se nos invita a acercarnos a todas las interacciones con curiosidad y a suspender nuestro deseo de tener una sola respuesta y un acuerdo.
Kenneth Gergen
Senior Research Professor of Psychology, Swarthmore College
Affiliate Professor, Tilburg University of Tilburg, The Netherlands
President, The Taos Institute
Traductor: Sylvia London, Mexico City, Mexico
Para mi la pregunta es cómo puede el dialogo transformar positivamente, porque creo que la mayoría de los diálogos, y con esto quiero decir las conversaciones, solamente sostienen nuestros patrones de lugares comunes en las relaciones. Y hay también diálogos discordantes en los que la transformación no respeta la relación. Cuando pienso en la transformación positiva, empiezo a pensar en términos de micro-prácticas conversacionales que pueden elevar la trayectoria de la relación. Por ejemplo, supongamos que la relación es angustiosa, hay una discusión acalorada, o acusaciones mutuas, celos, dolor, etc. ¿Cuáles son esos leves movimientos conversacionales que uno o el otro pueden introducir en la conversación para cambiar la trayectoria y restaurar el bienestar común? Por ejemplo, movimientos simples tales como los de disculpas o apreciación pueden ser esenciales. Pero también existen posibilidades más sutiles y novedosas, y me gustaría pensar que esas valiosas habilidades pueden ser enseñadas en la terapia.
Claro que me estoy enfocando en la transformación de las relaciones en curso, y la cuestión aquí es diferente si nos preguntamos cómo puede el diálogo terapéutico ser positivamente transformador. Esta es una cuestión complicada, porque a diferencia de las relaciones en curso, la pregunta más importante es cómo puede el diálogo terapéutico transformar las relaciones fuera de las sesiones de terapia. Creo que los diálogos terapéuticos que desafían el entendimiento del cliente y abren nuevas posibilidades de acción y cambios en las vidas de los clientes pueden de hecho cambiar sus vidas. Sin embargo, quedan preguntas vitales en temas como, que tipo de retos y aperturas tienen tal potencial de cambio y cuándo y cómo estos nuevos entendimientos se pueden traducir en acción. Así que, las preguntas sobre
la naturaleza transformadora del diálogo siguen siendo cruciales.